Los zapatos de cuero son un complemento imprescindible en el armario de cualquier hombre o mujer que quiera vestir con elegancia y estilo.
El cuero es una piel animal que, al igual que la nuestra, necesita respirar, hidratarse y protegerse de las agresiones externas. Si no cuidamos nuestros zapatos de cuero, pueden perder su brillo, suavidad y color, además de agrietarse, deformarse o mancharse.
¿Cómo cuidar los zapatos de cuero paso a paso?
Cuidar los zapatos de cuero no es una tarea complicada, pero sí requiere constancia y dedicación. A continuación, te explicamos los pasos que debes seguir para cuidar tus zapatos de cuero correctamente:
Limpia los zapatos después de cada uso
El primer paso para cuidar los zapatos de cuero es limpiarlos después de cada uso con un cepillo suave o un paño de microfibra para eliminar el polvo y la suciedad superficial.
Si los zapatos están muy sucios o tienen alguna mancha, podemos usar un producto específico para limpiar el cuero, siguiendo las instrucciones del fabricante. También podemos usar una mezcla de agua tibia y jabón neutro, aplicándola con una esponja o un trapo húmedo y frotando suavemente. Después, debemos secar los zapatos con un paño seco y dejarlos al aire libre hasta que se sequen por completo.
Hidrata los zapatos regularmente
El segundo paso para cuidar los zapatos de cuero es hidratarlos regularmente con un producto adecuado para el tipo de cuero que tengamos (liso, nobuk, ante, etc.).
Para hidratar los zapatos de cuero, debemos aplicar una pequeña cantidad de crema o cera específica para el cuero con un paño suave o una esponja, extendiéndola por toda la superficie con movimientos circulares. Después, debemos dejar que el producto se absorba durante unos minutos y retirar el exceso con otro paño limpio y seco.
La frecuencia con la que debemos hidratar los zapatos de cuero depende del uso que les demos y del clima en el que vivamos. Si los utilizas con frecuentacia, es recomendable limpiarlos una vez al mes.
Protege los zapatos de las inclemencias del tiempo
El tercer paso para cuidar los zapatos de cuero es protegerlos de las inclemencias del tiempo, especialmente del sol y la lluvia. El sol puede provocar que el cuero pierda su color original y se decolore, mientras que la lluvia puede hacer que el cuero se moje y se estropee.
Para proteger los zapatos de cuero del sol, debemos evitar exponerlos directamente a los rayos solares durante mucho tiempo, ya que pueden dañar el material y alterar su color.
Para proteger los zapatos de cuero de la lluvia, debemos impermeabilizarlos con un producto específico para el cuero, que creará una capa protectora que repelerá el agua y la suciedad. Debemos aplicar el producto antes de usar los zapatos por primera vez y repetir el proceso cada cierto tiempo, según las indicaciones del fabricante.
Si los zapatos de cuero se mojan, debemos secarlos lo antes posible con un paño suave y rellenarlos con papel de periódico o con hormas de madera para que mantengan su forma. No debemos usar secadores ni fuentes de calor directas, ya que pueden dañar el cuero. Tampoco debemos guardar los zapatos mojados, ya que pueden generar hongos o malos olores.
